En las alturas de los andes la pobreza y violencia estatal extrema son ignoradas adrede por las instituciones del ESTADO y el CAPITAL, y mientras que los bloqueos sitian o cercan la capital (Lima)… la genocida de Dina Boluarte y su carnicero Otarola, intentan evitar que las regiones lleguen a Lima… ya que nuestras familias están dispuestas a darles un digno final a los miserables de la presidenta y compimches ministros.
Lxs asesinadxs por las fuerzas represoras del ESTADO del PERÛ no dejan de aumentar, en el preciso momento en el cual nos encontramos redactamos.
La tomberìa y milicos han matado a más de 50 personas, sin importarles la edad y han disparado a los torsos y cabezas… llenando morgues y hospitales en los andes y altiplano del territorio. Lxs heridos y detenidos aumentan, la persecusiòn se agudiza al grado de censurar textos y perseguir editoriales o librerias.
De la misma forma, hoy 21 de enero; la policìa ha iniciado operativos invadiendo espacios con autonomìa cómo las universidades (las cuales recibìan a manifestantes de las provincias de esta regiòn), viviendas de gente que ha dado cobijo a sus paisanos de provincia, asociaciones y colectivos de primeros auxilios.
Y es que la democracia peruana ha dado sus frutos, y nos hace vivir el «agradable» carácter «legal» de los ESTADOS DE EMERGENCIA… momento en el cual las fuerzas represoras tienen la total libertad de asesinar sin ninguna responsabilidad penal. Mientras que los pitucos (cuicos, fresas, adinerados, etc.) celebran, aplauden y besan a la tomberìa y militares por su carnicería; otrxs son encarceladxs, perseguidxs, torturadxs o asesinadxs.
Los ESTADOS DE EMERGENCIA también significan corrupciòn, algo que es genético en estas instituciones represoras, ya que tienen la total libertad de gasto y la mayor comprensiòn del Ministerio de Economìa ( el cual se ha caracterizado por ser de los más tecnócratas y discriminatorios, casí un cuarto poder).
Salen de Lima: helicópteros, camionetas, buses, aviones de guerra, municiòn, y personal (desde la vieja tomba de tránsito hasta el inexperto estudiante de primer año de la escuela de policìas). Y luego, según lo planeado por los carniceros, distribuyen a la tomberìa en las zonas de bloqueos. Las Fuerzas Armadas, gracias al espaldarazo de U.S.A, se encuentran
empoderados y mandan a sus cachacos a matar a las alturas de los andes e infiltran a su personal en las protestas con el fin de tener soplones, voyeuristas y saboteadores.
Al ver que la resistencia sigue y sus municiones se acaban, mandan al lamezapatos a la tienda de caramelos con 661 mil 530 dólares a adquirir todo tipo de golosinas a las cuales son adictos (perdigones, lacrimógenos, gas pimientas, municiòn, etc.). Luego buscan todo tipo de apoyo, lo que sea… sacan a los pobres caballos, movilizan al personal de las secciones más ilógicas (desde udex, tránsito y turismo), disfrazan autos de guerra de los milicos para volverlos democracy friendly, usan la movilidad y personal de serenazgo una especie de seguridad municipal) y luego celebran (EL PODER ECONÓMICO-POLITICO SIEMPRE RECOMPENSA AL MATARIFE).
Asì hemos llegado a una encrucijada donde hacerle frente a esta locura sangrienta significa ser una cifra más en la morgue.
Donde el limeño racista te considera subhumano por movilizarte. Donde asesinarte no trae problemas èticos o religiosos (al contrario las fuerzas religiosas la celebran).
Madres que buscan disuadir, con lágrimas, a sus hijos. Viajes cortos que se convierten en largos y carmesìes.
Mùsica emocionante que se transforma en sonidos chirriantes que imponen el silencio… en fin, masacradxs.
Son carcajadas para quienes tienen el poder y autoridad y lágrimas para nosotras.
Las mujeres, trans, machonas, maricones, lesbianas, trakas, no binaries, qhariwarmis, cabrxs, bisexuales y diversidades anarcas marrones, andines, aymaras, prerizadas no sabemos de “justicia” en ningun territorio. Constantemente estamos en resistencia por nuestra posición política y nuestra existencia. No somos ajenxs a esta crisis, jamás seremos indiferentes al abuso de quien tiene poder. Los asesinatos, balas, golpes, agresiones jamás las olvidaremos, y las regresaremos.
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In the heights of the Andes, poverty and extreme state violence are deliberately ignored by the institutions of the STATE and the CAPITAL, and while the blockades are located in the capital (Lima)… the genocide of Dina Boluarte and her butcher Otarola, they try to prevent the regions from reaching Lima… since our families are willing to give a dignified end to the miserable of the president and complicit ministers.
The number of people killed by the repressive forces of the STATE of PERU continues to increase, at the precise moment in which we are writing.
The tomberìa (police) and milicos (military) have killed more than 50 people, regardless of age and have shot at the body and heads… filling morgues and hospitals in the Andes and highlands of the territory. The number of injuries and arrests increases, the persecution worsens to the point of censoring texts and persecuting publishers or bookstores.
In the same way, today January 21; The police have started operations invading autonomous spaces such as universities (which received protesters from the provinces of this region), homes of people who have given shelter to their provincial countrymen, associations and first aid groups.
And it is that Peruvian democracy has borne its fruits, and makes us live the «pleasant» «legal» character of STATES OF EMERGENCY… moment in which the repressive forces have the total freedom to murder without any criminal responsibility. While the rich people celebrate, applaud and kiss the tomberìa and the military for their carnage; others are imprisoned, persecuted, tortured or murdered.
STATES OF EMERGENCY also mean corruption, something that is genetic in these repressive institutions, since they have total freedom of spending and the greatest understanding of the Ministry of Economy (which has been characterized as being one of the most technocratic and discriminatory, as well as a fourth power).
They leave Lima: helicopters, trucks, buses, war planes, ammunition, and personnel (from the old traffic police to the inexperienced first-year student at police school). And then, as planned by the butchers, they distribute the tomberìa in the blockade areas. The Armed Forces, thanks to the backing of the U.S.A., are
empowered and they send their polices to kill at the heights of the Andes and infiltrate their personnel in the protests in order to have informants, voyeurists and saboteurs.
Seeing that the resistance continues and their ammunition is running out, they send the shoelicker to the candy store with $661,530 to buy all kinds of sweets to which they are addicted (buckshot, tear gas, pepper spray, ammunition, etc.). Then they search
all kinds of support, whatever… they take out the poor horses, mobilize the personnel of the most illogical sections (from UDEX, transit and tourism), they disguise military war cars to make them democracy friendly, they use mobility and serenade staff
(sort of municipal security) and then celebrate (ECONOMIC-POLITIC POWER ALWAYS REWARDS THE SLAUGHTERER).
Thus we have reached a crossroads where facing this bloody madness means being one more figure in the morgue.
Where the racist Lima considers you subhuman for mobilizing. Where murdering you does not bring ethical or religious problems (on the contrary, religious forces celebrate it).
Mothers who seek to dissuade, with tears, their children. Short trips that become long and crimson.
Exciting music that turns into screeching sounds that impose silence… in short, massacred.
They are laughter for those who have power and authority and tears for us.
For us,womens, trans,queers,lesbians, tomboys, maricones, no binaries, qhariwarmis, cabrxs, bisex y anarchists brown, andines, aymaras, precarious persons We do not know of «justice» in any territory. We are constantly in resistance because of our political position and our existence. We are not alien to this crisis, we will never be indifferent to the abuse of those who have power. We will never forget the murders, bullets, beatings, and aggressions, and we will return them.
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Nas alturas dos Andes, a pobreza e a extrema violência do Estado são deliberadamente ignoradas pelas instituições do ESTADO e da CAPITAL, e enquanto os bloqueios estão localizados na capital (Lima)… o genocídio de Dina Boluarte e seu açougueiro Otarola, tentam impedir que as regiões cheguem a Lima… já que nossas famílias estão dispostas a dar um fim digno aos miseráveis do presidente e ministros cúmplices.
O número de pessoas mortas pelas forças repressivas do ESTADO do PERU continua aumentando, no exato momento em que escrevemos.
A tomberìa (polícia) e milicos (militares) mataram mais de 50 pessoas, independentemente da idade e dispararam contra corpos e cabeças… enchendo necrotérios e hospitais nos Andes e nas terras altas do território. Aumenta o número de feridos e prisões, a perseguição se agrava a ponto de censurar textos e perseguir editoras ou livrarias.
Da mesma forma, hoje 21 de janeiro; A polícia iniciou operações invadindo espaços autónomos como universidades (que receberam manifestantes das províncias desta região), casas de pessoas que acolheram os seus conterrâneos provinciais, associações e grupos de primeiros socorros.
E é que a democracia peruana tem dado seus frutos e nos faz viver o caráter «legal» «agradável» dos ESTADOS DE EMERGÊNCIA… momento em que as forças repressivas têm total liberdade para assassinar sem qualquer responsabilidade criminal. Enquanto os ricos celebram, aplaudem e beijam a tomberìa e os militares por sua carnificina; outros são presos, perseguidos, torturados ou assassinados.
ESTADOS DE EMERGÊNCIA também significam corrupção, algo que é genético nessas instituições repressivas, pois têm total liberdade de gastos e a maior compreensão do Ministério da Economia (que tem sido caracterizado como um dos mais tecnocráticos e discriminatórios, além de à quarta potência).
Eles saem de Lima: helicópteros, caminhões, ônibus, aviões de guerra, munições e pessoal (do antigo policial de trânsito ao inexperiente aluno do primeiro ano da escola de polícia). E então, conforme planejado pelos açougueiros, eles distribuem a tomberia nas áreas de bloqueio. As Forças Armadas, graças ao apoio dos EUA, estão empoderados e mandam sua polícia matar nas alturas dos Andes e infiltrar seu pessoal nos protestos para ter informantes, voyeuristas e sabotadores.
Vendo que a resistência continua e suas munições estão acabando, eles mandam o lambe-sapato à confeitaria com $ 661.530 para comprar todos os tipos de doces nos quais são viciados (chumbo, gás lacrimogêneo, spray de pimenta, munição, etc.). Então eles procuram
todo tipo de apoio, seja qual for… tiram os pobres cavalos, mobilizam o pessoal das seções mais ilógicas (de UDEX, trânsito e turismo), disfarçam carros militares de guerra para torná-los amigos da democracia, usam mobilidade e pessoal de serenata
(espécie de segurança municipal) e depois festejar (O PODER ECONÔMICO-POLÍTICO SEMPRE RECOMPENSA O MATADOR).
Chegamos assim a uma encruzilhada onde enfrentar esta loucura sangrenta significa ser mais uma figura na morgue.
Onde o Lima racista te considera subumano por mobilizar. Onde te assassinar não traz problemas éticos ou religiosos (pelo contrário, as forças religiosas o celebram).
Mães que procuram dissuadir, com lágrimas, seus filhos. Viagens curtas que se tornam longas e carmesim.
Música emocionante que se transforma em sons estridentes que impõem silêncio… em suma, massacrados.
São risos para aqueles que têm poder e autoridade e lágrimas para nós.
Para nós, mulheres, trans, queers, lésbicas, molecas, maricones, não-binárias, qhariwarmis, cabrxs, bissex e anarquistas pardos, andinos, aymaras, precários. Não sabemos de «justiça» em nenhum território. Estamos constantemente em resistência por causa de nossa posição política e nossa existência. Não estamos alheios a esta crise, nunca seremos indiferentes aos abusos de quem tem poder. Jamais esqueceremos os assassinatos, balas, espancamentos e agressões, e os retribuiremos.